Hombre de 36 años cometía actos lascivos a una niña cuando la mamá no estaba. Vivía con ella desde hace tres años en Cambalache.
“Mami cuando me dejaste sola con el Topo, él me llevó al cuarto, me quitó toda la ropa y se acostó encima de mí. Yo le pedí que se bajara, porque pesa mucho”, reveló una niña de 5 años a su mamá.
La mujer lloró cuando escuchó lo que le dijo la segunda de sus tres hijas.
De inmediato, la tomó de la mano e indagó más en lo que había pasado.
Cuando la pequeña repetía los detalles, Anervis Salas, de 36 años y padrastro de la víctima, llegó a la vivienda.
“¿Por qué le hiciste ese daño a mi hija?”, le reclamó.
De acuerdo con su versión, el hombre se arrodilló y le juró que no le había hecho nada a la menor. “Si quieres le haces una prueba para corroborar lo que te dijo”, pidió el hombre.
Pero las palabras de el Topo -como lo conocen- no convencieron a la mujer.
Ella sabía que algo no estaba bien. “Yo sé que mi hija no va a inventar una cosa así”, alegó. Dijo que cuando el Topo se percató que estaba llamando a las autoridades, salió de la vivienda con rumbo desconocido.
Denuncia
A las 10:00 de la mañana de este miércoles la mujer avisó a los operadores del Servicio de Emergencias 1-7-1 y contó lo que pasaba en su casa.
De inmediato, una comisión de la Policía del Estado Bolívar, específicamente comisaría Unare, se trasladó al sitio.
Luego de tomar la denuncia de la dama, los oficiales iniciaron la búsqueda del sospechoso.
Las comisiones recorrieron toda Loma Linda en Cambalache, donde se mantuvieron gran parte del día; también fueron a las barriadas aledañas, pero no lo hallaron.
Uno de los hermanos llegó hasta la casa de la víctima a conocer lo que sucedía y aseguró que no sabía sobre su paradero.
Creen que se esconde en la vivienda de otro familiar.
Iba a el mercado
La mamá contó que durante la mañana le dijo a sus dos hijas, de 5 y 10 años, que quedarían solas en casa, porque ella saldría al mercado.
Pero la niña de 5 sabía que el Topo estaba por llegar y estarían a su cargo.
Así que le suplicó a la mamá que no la dejara sola con él, “porque -presuntamente- le tocaba sus partes”.
Supuestamente, el hombre cometió actos lascivos en dos oportunidades, la última fue hace una semana, solo que por miedo la niña no se atrevía a contarlo.
Durante el interrogatorio, la víctima le insistió a su mamá que a su hermanita de 10 años el Topo le hacía lo mismo: “La llevaba hasta una de las habitaciones, la desnudaba y se montaba encima de ella”.
Pero la otra infante no quiso contar nada. “Desde que le preguntamos se quedó callada, aislada dentro de la casa”, aseguró la madre.
Tres años
Tres años
Cuando la mujer decidió vivir con el Topo, las niñas tenían 2 y 8 años. Llevan tres juntos y de la relación hay una bebé de meses.
La mamá de las pequeñas aseguró que siempre habla con ellas; “yo les digo que nadie debe tocarlas y si eso pasa deben contarme enseguida”.
Indicó que durante el tiempo que vivió con el Topo no vio nada irregular, hasta que la niña contó del abuso.
“No pongo en duda lo que me dice mi hija, yo hablo con ellas siempre y sé que no me está mintiendo”, finalizó.
Al cierre de esta edición, la policía continuaba la búsqueda del aberrado.
Exámenes
Como parte del procedimiento, la mujer denunciará en la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, para que las niñas sean sometidas a exámenes médico forenses que determinen el tipo de abuso del cuál fueron víctimas