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Kenny Finol “La muñequita linda” era feliz solamente en el Facebook (Fotos)


Una jovencita de cabello negro, de baja estatura y con un físico poco llamativo vivió con el sueño de ser bella, tener ropa de marca y ser reconocida, pero eligió el camino equivocado para lograr su sueño.

A pesar de vivir en un barrio, Finol poco a poco fue refinando su forma de vestir y de lucir en las fotos. Sus rasgos físicos cambiaron; su ropa cada vez era más lujosa y delicada, pero siempre mantuvo el acento marabino que la caracterizó.

“Kenny, tenía el cabello negro, era muy delgada y soñó con un cuerpo voluptuoso. Siempre quiso ayudar a su familia humilde y lo logró”, expresó Margarita Fernández, allegada de Kenny.

Aunque fue a cambio de sexo, la joven fallecida lo hizo porque no encontró otra salida, vivía rodeada de personas humildes y siempre llevó a Venezuela en su corazón. Fernández reiteró que Kenny era muy amigable, vivió su adolescencia en fiestas, era conocida en las discotecas de Maracaibo por ser muy “rumbera”.

Finol, pasó de ser pelinegra a una “rubia exótica”, luego de la transformación de su cuerpo a cambio de sexo, todo el barrio quería estar con ella, pero la joven ya no quería estar con todos. Iba más allá, solo buscaba gente poderosa que la llevara donde quería estar.

“Aún estando lejos, la gente del barrio la admiraba, estaban pendiente de cómo se vestía, de sus fotos en las redes sociales y la muerte de ella fue muy dura para todos nosotros”, expresó Fernández.

Asimismo, los que coordinaban los concursos de belleza que se hacían en el barrio donde ella vivió, hoy en día se arrepienten de no haber dejado ser partícipe a Kenny en dichos eventos. Quizás, su vida sería otra, y estaría actualmente en el mundo del modelaje, ya que ese fue su sueño.

“La muñeca más cara de la vitrina” fue más allá de ser una joven escort, emigró como la mayoría de los jóvenes venezolanos, pero con el sueño de ser más bella y llegar lejos para ser una dama de compañía reconocida, pero con eso, solo consiguió la muerte porque su nueva vida en México estaba rodeada de mafiosos.

Finalmente, Fernández, expresó que Kenny tenía un corazón noble, donde llevaba a las personas de su barrio en su corazón, y a pesar de la distancia, siempre estuvo pendiente de su mamá.









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