
Un joven fue retirado de su féretro en pleno velorio cuando los asistentes notaron que éste aún respiraba y realizaba tenues movimientos corporales.
Al parecer, Watson Franklin Mandujano Doroteo, dado por muerto cuando realmente se encontraba sedado debido a los medicamentos que le fueron aplicados un día antes en una consulta odontológica.
“Le pusieron diazepan en apollas”, dijo una de sus familiares al tiempo que exigió justicia para el joven de 24 años que fue dado como muerto por los médicos de un hospital de la zona.
Pese a los esfuerzos por devolverlo a la vida tras ser retirado de su urna, una vez que llegó al hospital le informaron a sus familiares que “recién había dejado de existir”.
Con información de Infobae